Los atardeceres, el desarraigo de las raíces, la vuelta a ellas. Ranchos. El rancho grande y la banda sonora de tu vida. ¿Nunca ha sentido usted la necesidad de jugar al bridge? ¿Teme usted que es juego difícil y demasiado intelectual? Antonia, Mari y Rigoberta se debaten día a día entre ellas, se critican y se desenvuelven en un medio costumbrista, que no menos surrealista. Comparten una mesa, un atardecer, una bolsa para la fruta muy bonita que dentro no sabemos que lleva, los anuncios de la tele, los videos de autoayuda de personas de más de treinta años, la música italiana y rezar en italiano. El asco y las perlas.
Las mueve la nostalgia. ¿Qué es la nostalgia? Una de ellas quiere ser un águila, otra no quería ser madre y la otra, bueno la otra, bastante tiene. No son conscientes de que están buscando su libertad, quizá alguna de ellas la encuentre dentro de este escenario y así los espectadores puedan con ella, volar. Pero eso todavía no lo sabemos. Porque igual no pasa.
Merienda Dramática
Es una compañía de personas que buscan encontrar la mezcla entre los lenguajes contemporáneos y no tan contemporáneos. Esperamos poder investigar todo esto y ver que nace, que muere y que se transforma. Esta compañía está formada por personas de diferentes edades y de lugares distintos, personas abiertas a la colaboración con más personas, en pro de la creación colectiva.
Merienda Dramática nace de la necesidad de contar desde una perspectiva feminista las vicisitudes que les atraviesan, incomodan o inquietan. Desde la indagación de las costumbres propias de la cultura hasta los ecos que nos resuenan de las lecturas que les conforman.
Una comedia fue su primera creación, que nace de un collage de sensaciones, imágenes, música, color y sentimientos. El absurdo, el surrealismo cotidiano, la comedia que todo esto implica, los dramas actuales y no tan actuales, el feminismo, generaciones perdidas. Todo esto está presente en sus funciones. Con Ninguna planta es de interior buscan investigar la continuidad en los personajes, el costumbrismo ¿Dónde nos lleva? Las herencias familiares, la libertad y el campo. Todas tienen un punto autobiográfico de la autora que lo usa de punto de partida, para dirigirnos a mundos de mucho color que esconden mucha oscuridad dentro.